Cerraste tus ojos, cuando la voluntad de Dios lo quiso,
te alejaste de tus seres queridos cuando tu deber en la tierra cumpliste,
para ir al encuentro con Dios.
Como una avecilla volaste dejando un vacío en nuestras vidas,
pero tus bellos recuerdos perduran para siempre en nuestros corazones.
En nuestras almas hay un infinito dolor.
En nuestra mentes un recuerdo de amor.

PARTE MORTUORIO

En la ciudad de Loja, a los 21 días del mes de junio de 2017, de manera inesperada, retornó a la casa del Creador quien en vida fue, abnegado esposo, ejemplar padre, cariñoso abuelito, entrañable hermano y leal amigo, Ing. Mg.:

Marco Antonio López Ambuludí

Sus padres: Segundo Manuel López Saquicela (+) y María Macrina Ambuludí Granda (+).
Su esposa: Rosalía del Cisne Pineda Sanmartín.
Sus hijos: Marco Vinicio, Mayra (+), Luis Eduardo, Fanny Alexandra y Johan Marti López Pineda; Sebastián López Acaro.
Sus hijos políticos: Luz Arrobo, Viviana Sarango y Byron Cumbicus.
Sus nietos: Salma Joselin, Marlon Vinicio y Keila Damaris López Arrobo; Daniela Nicole, Byron Andrés y Justin Daniel Cumbicus López.
Sus hermanos: Ángel Humberto, Fanny María (+), Rosa Elvira (+), Luis Cornelio, María Cecilia, Segundo Efrén, Wilson Patricio, Edgar Daniel, Martha Macrina (+), Rosa Lucrecia (+) y Hna. Sor. Franchesca López Ambuludí.
Sus hermanos políticos: Luz Valencia, José Lazo, Fredy Armijos, Antonieta Jiménez, Fernando Correa, Libia Tene, Paulina Guachizaca y Esperanza Ortiz.
Sus tíos, sobrinos, primos y más familiares cumplen con el penoso deber de comunicar su sentido deceso e invitan a la velación de sus restos mortales en la SALA PLATINUM del Centro de Velaciones Funeraria Jaramillo, ubicado en las calles Andrés Bello y Juan José Peña.
La ceremonia religiosa de cuerpo presente por el eterno descanso de su alma se oficiará en la Iglesia “Perpetuo Socorro” el día viernes 23 de junio de 2017, a las 15h00  y luego al traslado e inhumación de sus restos mortales al Camposanto – Crematorio “Jardines del Zamora”, ubicado en la vía de Integración Barrial a 300 m. del redondel del Centro Educativo “Mater Dei”.
Por este acto de solidaridad cristiana, sus deudos quedan eternamente agradecidos.

PAZ EN SU TUMBA